

He escuchado cosas del tipo “es que tus jabones van envueltos en papel kraft y cinta de algodón y para fabricarlo se gastan muchos recursos” (te lo prometo, además fue al poco de abrir y todavía no estaba tan curtida, puedes figurarte mi cara de póker). Si algo estoy aprendiendo desde que creé Ondínate es a no juzgar. Personalmente, ya no compraría jamás un cepillo de dientes en el supermercado y sin embargo lo he hecho decenas de veces a lo largo de mi vida, por absoluto desconocimiento.īásicamente, esto es un “Yo soy yo y mis circunstancias” Las prioridades y circunstancias personales de cada individuo van a influir por completo en sus decisiones de consumo. Prefiero pagar la mitad y con lo que me sobra me voy de spa. Pues yo no me gasto un dineral en cremas ni loca. Mi vecina dice que ha encontrado la crema de su vida, no piensa cambiar más ¡porque lo tiene todo! Hidrata, repara, quita las arrugas y te hace parecer buda, sobretodo porque ha de vaciar el bolsillo cada vez que la repone.
